Ciudadanos del mundo
Le llegó la hora a los millenials de viajar y comerse el mundo, se aprendió que la vida es corta y por hay que aprovecharla, y qué mejor modo de hacerlo sino es recorriendo cada lugar del planeta.
Hoy — como ya es costumbre todos los 22 de abril — se celebra el día de la tierra, nuestra pequeña nave espacial, la que flota en el inmenso mar llamado universo, y muchos harán sus llamados urgentes a seguir poniendo toda nuestra energía y esfuerzos en cuidarla, preservar cada especie (tanto animal como vegetal) y tratar de que el impacto de nuestras acciones para las próximas generaciones no sea tan trágico y devastador como las antiguas generaciones han procurado enseñarnos.
La conservación y el cuidado de nuestro único hogar son importantes y deberíamos levantarnos cada día con un poco de consciencia ambiental, las grandes acciones comienzan con pequeñas contribuciones y si pensamos que no solo somos nosotros sino miles de millones de personas las que toman la iniciativa y hacen su contribución, las pequeñas acciones dejan de serlo y el impacto es masivo. Así que lo invito a dejar de lado su actitud engreída, creer que el cambio comienza por los otros y “hasta que no vea el cambio no me uno”: recicle, ahorre agua y energía eléctrica o haga el #BasuraChallenge (sí esta nota se agregó el 2019).
Sin embargo, enfocaré el post de hoy en los viajes, no soy de viajes (porque “no puedo”) ni de fiestas — porque no me gustan –, pero mi generación, los místicos e irreverentes ‘millenials’ están sentando un gran precedente en comparación a esas anteriores generaciones, los que están entre los 20 y los 30 dicen por estos días: ya no quiero tener hijos a tan temprana edad, no quiero amargarme la vida junto a alguien tan pronto, tenemos un poco más de consciencia sobre la conservación y el cuidado del planeta; y tenemos energía de sobra para sacar las petacas y con poco dinero darle la vuelta al mundo en 80 días (a veces más, a veces menos).
Si usted tiene entre 33 y 18 años seguramente puede asumir de modo más personal mis opiniones, no es malo; eche memoria a esos tiempos donde le preguntaban qué quería hacer cuando fuera grande o cuando saliera del colegio, en la mayoría estaba presente la idea querer viajar y conocer cada rincón del mundo.
Y si aún no le han hecho esa pregunta, pues tiene tiempo, no se desespere; le plantearé un ejercicio que una prima querida que ahora está en el místico continente asiático, nadando en el Ganges, llenando su paladar de especias, conociendo los tesos de la yoga y visitando Kharyurajo en India o simplemente viendo los árboles de cerezo florecer esta primavera (sí este apunte también es del 2019); me propuso, mucho antes de que se estuviese deleitando en Asia, pensar en solo cinco lugares o países del mundo que me gustaría conocer y enfoque toda su energía para ver materializada, tarde o temprano, su estancia en este quinteto de lugares. Le propongo ese ejercicio hoy día de la tierra a usted lector o lectora.
Es personal, no es necesario que los diga o que necesariamente deba ir allí, de hecho, India no estaba en los cinco lugares que a mi prima le gustase visitar inicialmente, está en los míos, siempre digo impotente “se me adelantó”. Pero eso no viene al caso; el ejemplo de ella es sencillo y plantea una idea: enfoque su mente en querer viajar, lanzarse a la aventura y verá.
Es así como hoy, el día de la tierra, debe ver lo importante de no quedarse quieto, dando vueltas en un solo lugar; entonces, empiece por esas pequeñas acciones de conservación del planeta: recicle, ahorre agua y energía eléctrica, no use carro, no se estrese en TransMilenio, use bicicleta, adopte hábitos más sanos, somos ciudadanos del mundo y si estamos en un estado excelente de plenitud y bienestar personal, nuestro modo y energía lo sentirá el planeta.
Sobre los viajes existen casos de personas que con dos mudas de ropa y pocos pesos en la billetera, han dado la vuelta al mundo a punta de dedo y hacerse amigos de las personas, el carisma y el ser extrovertidos le pueden ayudar si es que quiere ser mochilero, carece de buena gracia y carisma, pude volverse fotógrafo, existen concursos tanto para aficionados, fotoperiodistas o profesionales que son internacionales y dan cabida a la posibilidad de moverse por el mundo, con todos los gastos pagos, sea para reclamar el jugoso premio o por mero intercambio cultural ¿si ve por qué es que no hay excusa para quedarse quieto?
Deje la pereza y de decir “no puedo”, haga las maletas, pida permiso y avise dónde va a estar — si no quiere que su mamá esté pegada al techo — , salga a caminar y empiece el viaje por su barrio, su ciudad, conozca cada rincón de su país (bueno o malo, con problemas o no, es su madre patria); vaya a esos cinco lugares de su lista perfecta y vuélvase un ciudadano del mundo.
No puedo dejar de hacer énfasis en el día de la tierra, es importante tomar acciones desde nuestros hogares y hacerlas comunitarias, locales, ese tipo de acciones, al final, resultan haciendo más eco.
Planet Earth are you just
Floating by, a cloud of dust
A minor globe, about to bust
A piece of metal bound to rust
A speck of matter in a mindless void
A lonely spaceship, a large asteroid
Cold as a rock without a hue …
Planet Earth, gentle and blue
With all my heart, I love you.
Planet Earth (poema) — Michael Jackson.
¡FELIZ DÍA TIERRA! ¡FELIZ DÍA, CIUDADANO DEL MUNDO! GRACIAS POR LEER.